que muac
Imagen totalmente renovada del restaurante del Castillo de San José

En estos tiempos donde lo gastronómico ha saltado a las parrillas de todas las televisiones generalistas en un muestrario de cómo cocinan aficionados, profesionales, madres, niños….y donde el chef Chicote ejerce de coach para tratar de reflotar locales, un veterano restaurante lanzaroteño ha cambiado radicalmente su propuesta para ver si así mejora sus resultados económicos. El vetusto restaurante del Museo Internacional de Arte Contemporáneo del Castillo de San José, con una carta que no se renovaba desde hace lustros, pasa ahora a llamarse Qué Muac tratando así de posicionarse entre los locales captadores de los primerizos en salir a «echarse algo», pero que al mismo tiempo quieren mantener clientela fija entre los más exigentes gourmets y los que buscan algo rápido antes de seguir la noche.

tapas
La tapa es el eje central del local

Qué Muac es una apuesta fresca con nuevas cartas de comida y bebidas, nuevos contenidos, nuevos horarios, nueva imagen, nuevo packaging y nuevas propuestas para la noche de los viernes y sábados que dan vida a un producto totalmente innovador en el conjunto de la restauración insular.

La tapa en todas sus variantes, hasta un total de 24, es el eje central de Qué Muac. Unas tapas evolucionadas y modernas, presentadas y elaboradas de manera novedosa, siguiendo los patrones de las últimas tendencias de la gastronomía de autor. Así, en medio de nuevas servilletas, vajilla o posavasos, no es extraño encontrar unos palitos de queso dentro de un carrito de supermercado, una barbacoa“en miniatura” de jamón serrano o una muy moderna y particular forma de presentar las papas arrugadas.

palitos queso
Originales soportes para las degustaciones

Pero no sólo de tapas vive un restaurante que conecta las últimas tendencias de la restauración con lo mucho y bueno de las tradiciones culinarias de la isla. Así, una completa carta de carnes y pescados de primera calidad, una cuidada selección de postres y una extensa propuesta de vinos llegados desde todas las islas del archipiélago articulan una oferta creada para descubrir, crecer, compartir y generar conocimiento alrededor de la gastronomía.

Las noches de los viernes y los sábados, al servicio de restauración se unen el arte, con la exhibición de proyectos de videocreación, y sesiones de DJ’s durante las que podremos degustar cualquiera de las sugerencias que se ofrecen en la carta del servicio de Bar.