Los visitantes del Monumento al Campesino viven la experiencia de elaborar una pella de gofio al estilo tradicional.
Después del taller ‘Crea tu salsa canaria’ en el que alumno descifra los enigmas para crear la rica salsa canaria, los CACT han puesto en marcha ‘Crea tu pella de gofio’, una iniciativa que, impartida por Estefanía González, persigue difundir el conocimiento de las tradiciones de los fogones del archipiélago entre quienes se acerquen hasta el Monumento al Campesino.
La pella de gofio fue un producto básico de la alimentación de los pueblos tradicionales del archipiélago, que lo usaban a modo de pan acompañando a otros platos. En tiempos de hambruna, fue esencial en la dieta popular canaria debido a la sencillez de sus ingredientes y a su alto valor nutricional. Hoy, rara es la romería o encuentro tradicional en los que no tiene papel protagonista. Como en toda fórmula culinaria que se precie, no hay una receta única para su elaboración, pero atendiendo a sus componentes básicos podemos clasificar las pellas en saladas, elaborada con gofio, agua o caldo de pescado, aceite de oliva, un poco de azúcar y sal; y dulces, hechas a partir de gofio, agua, miel, frutos secos, un toque de sal y plátanos maduros.
A conocer su trascendencia histórica y descubrir algunos de los secretos y trucos para su mejor elaboración ayudará, a buen seguro, el taller ‘Crea tu pella de gofio’ que, organizado por los Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo de Lanzarote, tiene lugar de domingos a jueves, de 11.00 a 13.00 horas, dentro de las actividades que contempla el Plan de dinamización del Monumento al Campesino.
Hay que recordar, además, que todos los domingos, a las 14.00 horas, el Monumento al Campesino acoge distintas actuaciones folclóricas con cuerpo de baile, y que la carta del restaurante ha sido renovada recientemente para presentar una línea de platos elaborados a partir de productos de primera calidad de la tierra y el mar lanzaroteños. Asimismo, los aperos e instrumentos de labranza tradicionales, de un lado, y la cerámica del reconocido artista y etnógrafo Juan Brito, por otro, siguen ocupando un lugar destacado en el centro. Turistas y residentes tienen la oportunidad de admirar la colección sobre la mitología que rodea a la princesa Ico antes de la llegada de la expedición de los normandos Jean de Bethencourt y Gadiferr de la Salle.