Tras 14 años en Marina Rubicón, el emblemático restaurante echa el cierre

Lanzarote pierde un referente de buena cocina. Y Playa Blanca todo un emblema. ‘Casa Brígida’, tras catorce «extraordinarios años» en el puerto deportivo Marina Rubicón, cierra sus puertas. Así lo señala Pedro Santana, chef y propietario, quien heredó el amor por la cocina y el ímpetu emprendedor de Brígida y Cristóbal, pioneros de la gastronomía en Playa Blanca.

Santana lo ha querido recordar en el escrito con el que se despide de esta etapa. «En este largo periodo de tiempo, nuestras instalaciones en el magnífico puerto de Marina Rubicón han acogido a multitud de personas», escribe. «Clientes, que el amable trato de nuestro personal ha convertido en familia, la familia de Casa Brígida«.

Y confiesa que se hizo realidad «aquel sueño que Brígida y Cristóbal, pioneros de la restauración en el pueblo marinero de Playa Blanca, tuvieron en los años setenta del pasado siglo». ​

Gratitud a todos

«Vaya por delante nuestra gratitud a todas las personas que de una u otra manera han contribuido a que Casa Brígida haya sido un referente de la cocina de calidad: clientes, proveedores, gestores del puerto de Marina Rubicón y nuestro magnífico plantel que desterró de su vocabulario la palabra dificultad», señala el chef en el momento de la despedida.